JOSÉ MARÍA GÓMEZ GÓMEZ

JOSÉ MARÍA GÓMEZ GÓMEZ

POESÍA

JOSÉ MARÍA GÓMEZ GÓMEZ

Nació en Parrillas (Toledo) el 16 de marzo de 1951. Vive en Talavera de la Reina, donde ha ejercido durante muchos años como Catedrático de Lengua Española y Literatura (IES Padre Juan de Mariana) y Profesor Tutor de la UNED. Es miembro de numerosas instituciones provinciales y nacionales. Y ha escrito libros de historia, arte y literatura, y centenares de artículos en periódicos y revistas. Sus escritos son fundamentales para entender la historia y la cultura de Talavera de la Reina y su comarca. Como poeta ha publicado nueve libros y es una destacada figura en el panorama actual español por el rigor de sus versos y la profundidad de su pensamiento.

Libros de poesía publicados:
                 
- En 1979 publica su primer libro. “El sueño apócrifo”.
- En 1984 Premio de Poesía “Ciudad de Toledo” con “Yegua de la noche”.
- En 1987 gana el Premio “Florián de Ocampo” de la Diputación de Zamora y Consejo Superior de Investigaciones Científicas con su libro “La máscara de oro”.
- En 1997 reunió estos tres libros de versos con el título “Los recodos del laberinto”,  y nuevos poemas sobre Toledo y Talavera de la Reina.
-  En el 2006  publicó “El libro y la sombra”, poemario inspirado en El Quijote, con ilustraciones del pintor Fidel María Puebla.
-  En 2012 ha publicado  “Poemas de la Hispanidad”.
- En 2013: “Talavera en verso”.
- En 2014: “Éxtasis en Toledo”. Homenaje al Greco en su IV Centenario
- En 2015: “Poemas del Pan Divino”. Homenaje al Corpus de Toledo en el V Centenario de la Custodia

Poética

Si alguna definición consiente mi quehacer poético es el de “poesía intelectual”, expresión acuñada por Jorge Luis Borges para aludir a sus versos, y a la que yo me adhiero en líneas generales. Esta expresión, que puede parecer un oxímoron o contradicción, y tal vez lo sea, en realidad sugiere que el ejercicio poético es la mágica o mística conjunción de inspiración y técnica consciente. Para mí la poesía tiene una raíz espiritual, intuitiva, es “esa cosa alada y evanescente” de que hablaba Platón, pero al mismo tiempo un quehacer intelectual, riguroso, consciente, sujeto a ciertas normas o técnicas que, de un modo general, hemos convenido en llamar figuras literarias, recursos o retórica. Mis poemas, desde este punto de vista, aspiran a expresar ese poso de melancolía y escepticismo trágico que en nuestra alma deja la consideración de los grandes enigmas universales. El pensamiento existencial ha impregnado nuestro tiempo de literatura trágica. En el fondo, cada uno de mis libros parte de un símbolo que alude o insinúa ese estigma existencial de nuestro tiempo. En los títulos se aventura la raíz del símbolo. Pero también la grandeza y el dolor de la patria (España, Toledo, Talavera…) y el inevitable “deseo de Dios y de inmortalidad” están presentes en mis versos.


Gnoseología
No sé quién soy. En esta quieta esfera
vertiginosa que es el universo
todos los versos son el mismo verso
y todas las palabras la primera.
En este fiel retorno soy el dueño
de un dolor que ya ha sido antes escrito.
Se confunden los mitos y mi mito,
un aluvión de sueños y mi sueños.
Todo lo que ha pasado en mí confluye.
Todo lo que seré y lo que he soñado
ha sido, es y será del otro lado
de este río que eternamente fluye.
Vuelve el mañana y el ayer y el hoy.
Vuelve el mañana... Y no sabré quién soy.


Talavera de la Reina
Cuando te abruma el sol de la mañana
en los duros calores del estío
o te muerde el ventoso escalofrío
del invierno de cruda tramontana,
no sé si cuerpo real o sombra vana
eres, o el estudioso desvaría
de Rojas, de Loaisa, de Mariana.
El tiempo dispersó tus monumentos.
Desbarató la incuria los cimientos.
Pero tu amor me obliga y exaspera.
Y aunque me duela el alma de pensarte
y me sangren los ojos de mirarte,
te seguiré soñando, Talavera.







Mis poemas, desde este punto de vista, aspiran a expresar ese poso de melancolía y escepticismo trágico que en nuestra alma deja la consideración de los grandes enigmas universales. El pensamiento existencial ha impregnado nuestro tiempo de literatura trágica. En el fondo, cada uno de mis libros parte de un símbolo que alude o insinúa ese estigma existencial de nuestro tiempo. En los título se anuncia la raíz del símbolo.